sábado, 18 de julio de 2015

No asumas, pregunta y sal de dudas. Feliz fin de semana

¡Hola a tod@s!

Acabo de terminar mi semana maratoniana y a tope de trabajo. Después del parón por mi escafoides, retomo con fuerza la actividad.

¿Y tú qué tal?, ¿Cómo ha ido tu semana? Espero que bien.

Entre los diferentes trabajos que he realizado esta semana, me quedo con un caso concreto de un conflicto que suele ser bastante habitual en las empresas. En una de las sesiones, descubrimos una queja sobre un problema de comunicación entre dos departamentos que estaba afectando directamente al servicio de atención al cliente.

Sin entrar en detalles. Fuimos poco a poco desenredando la maraña de la madeja, hasta dejar salir de forma muy sutil los verdaderos motivos y las emociones que sentían los protagonistas. Una vez puesto en conocimiento lo que cada persona sentía cuando hablaba con la otra, empezamos trazar los patrones y estrategias de comunicación para que ésta fuese la deseada para ambos, fluida, eficaz y resolutiva.

Si trabajas con más personas podrá serte familiar esta historia. Un pequeño problema de comunicación se puede convertir en un conflicto mayor debido al efecto bola de nieve. 

¿Por qué ocurren este tipo de problemas? Algo muy habitual es por que tendemos a asumir. 

Si, es muy normal que obviemos partes de un mensaje por que asumimos que la otra persona ya lo sabe. Tendemos a asumir que lo que estamos imaginando es la intención real del otro. Y en ocasiones, sólo es nuestra imaginación con las riendas sueltas.

¿Has pensado alguna vez mi compañero/a me tiene manía?, ¿Alguna vez has asegurado que tal cosa te la han hecho para fastidiarte?, ¿Has dado alguna vez mucha importancia a lo que otros podrían estar pensando de ti? Podía seguir haciéndote más preguntas de este tipo, pero... creo que ya me estás entendiendo, ¿O no?


Y en la mayoría de ocasiones asumimos que es así y punto, sin asegurarnos si estamos en lo cierto.

Aunque siempre hay excepciones, tu imaginación puede estar jugándote una mala pasada, te puede estar dando una información que no tiene que ser real necesariamente.  Quizás lo que estás interpretando no es lo que la otra persona te quiere decir. Quizás su intención no sea la que tú estás imaginando. Es recomendable preguntar si tienes duda, pregunta no pasa nada. No asumas.

Se que en ocasiones no resultará fácil. Es probable que te de vergüenza, que sigas inventándote las posibles respuestas que te daría la otra persona. Pero la única manera que tienes para averiguar que piensa  o cual es la intención de otra persona, es preguntándole directa o indirectamente, a menos que te consideres  Rappel. 

Te invito esta semana a que estés atent@  y detectes cuantas veces al día estás asumiendo algo como verdad absoluta y descubras que posiblemente no estés en lo cierto. Si prestas atención te darás cuenta en más de una ocasión; y te invito a que en vez de asumir, te atrevas a preguntar cual era la intención de la otra persona, que es lo que piensa o lo que quería decirte exactamente.

Prueba, prueba y ya me cuentas.

Y ahora como siempre, desearte un magnífico fin de semana, salud y éxitos.

José María Gomaríz

Muchas gracias.
Un saludo.