viernes, 29 de agosto de 2014

El Agua y la Montaña. Feliz fin de semana.

Muy buenas a tod@s, último viernes de agosto, algunos apurando los últimos días de vacaciones, otros incorporados ya al que hacer diario y  otros que que empezarán ahora. Tanto si estás de vacaciones como si no, cuando llega el viernes parece en muchos casos como si nos transformáramos, como que somos más felices, sonreímos más, somos más simpáticos, más agradables, nos enviamos whatsapp con imágenes o vídeos simpáticos, etc., etc.

La cuestión es la siguiente, ¿Que nos estamos contando para estar así de contentos y así de felices?, ¿En qué grado influyen esos mensajes simpáticos,  positivos o con imágenes entrañables y/o asociadas al placer o felicidad?. La respuesta es bastante lógica, respondemos ante todos esos estímulos, a nivel consciente, inconsciente y a nivel celular, energético y molecular . Hay multitud de estudios que demuestran los beneficios de los mensajes positivos, de como influye  la música en los seres vivos y no me refiero solo a los seres humanos, también inciden en animales y plantas, inclusive en frutas y verduras ya cortadas.

Esta semana, por azar cayó en mis manos un artículo sobre una investigación del científico y doctor en medicina alternativa japonés Masaru Emoto, hay mucho publicado en internet, en blog's, en web's científicas, youtube, etc. sobre sus experimentos, por si te apetece averiguar más. Aquí no puedo enrollarme mucho, pero te recomiendo que busques algo más de lo que te pongo aquí, es muy interesante. También puedes buscar su libro Mensaje del Agua. En resumen, los experimentos del Dr. M. Emoto vienen a demostrar como afectan tanto las palabras como los pensamientos e incluso la música a las moléculas del agua, recogiendo esto en unas impresionantes fotografías con microscopio que son dignas de admirar.

Juzga por ti mismo estas imágenes de las muestras de un mismo agua. Unas están expuestas a palabras y pensamientos negativos, otras a pensamientos y palabras positivas, y otras a diferentes mensajes y  estilos musicales.


¡Increíble!  ¿Verdad? Son alucinantes, son cristales de agua expuestos a imágenes, palabras, pensamientos y sonidos, hay muchas más por ahí si quieres ver alguna más.


Si reflexionamos sobre esto, podemos ir sacando muchas conclusiones lógicas, si a las moléculas del agua les afectan las imágenes, las palabras, los pensamientos y la música o los sonidos, ¿Cómo nos afecta a las personas que estamos formados por un 75% de  agua?, y ¿Como le afecta a la tierra que está compuesta en un 71% de agua?. Tiene sentido todo esto ¿no?. Efectivamente, nos afecta y mucho. 

Yo no soy científico, ni físico, ni químico, ni doctor en medicina, ni siquiera psicólogo, pero en mi opinión, si nuestro estado de ánimo es mucho mejor, más positivo y más feliz los viernes, es más que probable que estén influyendo esos mensajes, whatsapp, deseos de cosas buenas que nos enviamos unos a otros, llámalo energía, llámalo Karma, llámalo como tú quieras. Pero no me puedes negar una cosa, buen rollo da. Sin embargo el porcentaje de mensajes, deseos con buenas intenciones, etc., etc., es muy inferior los lunes, ni somos tan simpáticos, ni tan amables, ni siquiera sonreímos tanto.

Hay veces que me preguntan si este rollo "Happy" que intento transmitir es real o no, y si éste mail que te  escribo cada viernes y luego lo plasmo en mi blog es para vender después algo, mis respuestas son contundentes,  a la primera pregunta siempre respondo: Yo elijo ser feliz el mayor tiempo posible  y en el mayor grado posible, aunque no siempre lo consiga, a la segunda pregunta es aún más contundente: Ni en mi blog se vende nada, ni todas las personas que reciben el mail hacen negocios conmigo, aunque es cierto que también lo reciben mis clientes.

Como he escrito en varias ocasiones,  mi abuela me decía: "Niño tú haz el bien y no mires a quién" y en eso andamos.

Y hoy para terminar, quiero dejarte una fábula que viene al pelo. Iban un hijo y su padre caminando por las montañas. De repente, el hijo se cayó, se lastimó y gritó: ¡¡¡AAhhhhhh!!!. Para su sorpresa, oyó una voz repitiendo, en algún lugar en la montaña: AAAhhhhhhhhhhhhhhh!!!. Con curiosidad, el niño gritó:  ¿Quién eres tú?. Recibió de respuesta:  ¿Quién eres tú?. Enojado con la contestación, gritó:  ¡Cobarde!. Recibió de respuesta: ¡Cobarde!. Miró a su padre y le preguntó:  ¿Qué sucede?. El padre sonrió y dijo:  Hijo mío, presta atención. Y entonces el padre gritó a la montaña:   ¡Te admiro!. La voz respondió:  ¡Te admiro!. De nuevo el hombre gritó:  ¡Eres un campeón!. La voz respondió:   ¡Eres un campeón!. El niño estaba asombrado, pero no entendía nada. Luego el padre explicó: La gente lo llama ECO, pero en realidad es la VIDA. Te devuelve todo lo que dices o haces. Nuestra vida es simplemente reflejo de nuestras acciones. Si deseas más amor en el mundo, crea más amor a tu alrededor. Si deseas más competitividad en tu grupo, ejercita tu competencia. Esta relación se aplica a todos los aspectos de la vida. La vida te dará de regreso exactamente aquello que tú le has dado.
Fin de la historia.

Con esta pequeña historia me despido y te invito a que reflexiones sobre  ella,  que investigues sobre los experimentos del Dr. Emoto y cuestiones todo lo que te cuento, es mi opinión o como podemos llamarle  "mi verdad" y no tiene por que ser "la tuya". 

Y ahora como cada viernes, con mis mejores deseos, feliz fin de semana, salud y éxitos.

José María Gomaríz  



Muchas gracias.

Un saludo.

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